La ley 100 y los trabajadores de Drummond

www.elpilon.com.co

14/10/2008

Es normal, necesario y legal que los trabajadores se organicen en sindicatos, comités de base, federaciones, centrales obreras, entre otras, con el propósito fundamental de defender sus derechos. Pero que se organice una ‘Asociación de Trabajadores Enfermos’ no es del todo normal, su mera existencia debe encender las alarmas de todas las esferas gubernamentales y los sectores sociales porque es indicativo de la flagrante violación al derecho más preciado de los seres humanos que es el derecho a una vida sana y digna.

La multinacional Drummond cuenta hoy en su haber con una Asociación de Enfermos, a la cual en escasos seis meses lleva 200 afiliados, a los que les niega todos los derechos en salud condenándolos a morir en la miseria, debido a que al negarles la calificación de profesional a las enfermedades adquiridas en sus puestos de trabajo, en connivencia con la ARP, les desconoce indemnizaciones y tratamientos médicos adecuados para recuperar, si se puede, su salud y bienestar.

En el sistema de salud anterior, la ARP, del ISS, era la encargada de emitir el dictamen de las enfermedades profesionales; desde la vigencia de ley 100, se inicia un carrusel de ignominias, ya que el diagnóstico y calificación inicial sobre el origen de la enfermedad padecida por el trabajador lo emite la EPS, el cual debe pasar a una segunda instancia la ARP privada, que en muy buenas relaciones con los empresarios, termina contradiciendo la opinión inicial.

La ARP, en contravía del análisis del puesto de trabajo de la historia ocupacional, de la historia clínica, y de los riesgos por las labores realizadas en la empresa, a las enfermedades profesionales dictaminadas por la EPS, las convierte en enfermedades comunes y lo que debería tratarse en el estricto círculo médico se convierte en una disputa jurídica en la que el trabajador queda a merced del frondoso prontuario de esguinces jurídicos de la entidad de riesgos profesionales que termina birlando el derecho del trabajador enfermo.

No tienen límite los abusos que soportan los obreros de la Multinacional Drummond, son múltiples los riegos del entorno laboral y escasas las medidas de seguridad industrial adoptadas, lo que origina el abultado números de enfermos a los que se le recortan sus mesadas o se les niega, además son sometidos a la tortuosa y larga espera del veredicto que confirme el carácter de su enfermedad y en esa espera algunos han muerto; otros están a punto de perder su movilidad por las lesiones de columna o avanzan hacia problemas respiratorios crónicos, sordera por la contaminación auditiva o ceguera por la exposición permanente en sus sitios de trabajo.

A pesar de que la ley 100 anida lo necesario para que se cometan estos abusos, estas empresas la rebasan y ahondan en la negación del derecho a la salud de los trabajadores. Frente a esto, urge que las organizaciones sindicales nos propongamos, con otras organizaciones sociales, forjar un movimiento que le devuelva a la salud su carácter de derecho inalienable y se termine con el vergonzoso estigma que pesa sobre nuestra patria en donde mueren más colombianos por falta de atención en salud, que por la violencia que nos azota como lo asevera el senador Jorge Robledo.

avendaovicky@yahoo.com

Victoria Avendaño Pedrozo

0 comentarios:


Videos OCE-Unicesar Blip.tv

Universidad Popular del Cesar

Universidad Popular del Cesar
Click para ingresar

Grupo de OCE-Unicesar en Facebook

Archivo del blog

¿Te gusta nuestra pagina?

My Great Web page