DIOS lo quiera es la traducción de la interjección utilizada por el Presidente durante la conversación telefónica que sostuvo, “muy berraco”, con su amigo Luis Fernando Herrera y le pide al Señor que “ojalá me graben esta llamada”.
audio: MP3 at 537.9 kibibytes
Y no podía ser de otra manera. Al Presidente todo lo que pide se le cumple. El Señor está con él. La llamada en la cual él le reclama a su amigo, “la Mechuda”, el haber pretendido extorsionar al industrial Raúl Grajales, ofreciéndole sus buenos oficios a cambio de una cuantiosa suma para impedir del gobierno su extradición a los EE.UU., se divulgó. La iracundia del doctor Uribe, muy natural en su temperamento, es tan evidente que no tiene reparo en decirle a su amigo “la Mechuda” que le va a pegar en la cara “marica”, si no procede a desenlodar su nombre.
El doctor Uribe, siempre tan fino y tan dispuesto, una vez enterado de que el Señor le hizo el milagro y la conversación no solamente se grabó, sino que también se divulgó, no tuvo reato alguno en pedirle al pueblo, a su Patria, que le disculpe el temple de su vocabulario, pues todos saben que él no utiliza semejantes términos soeces, y pidió que lo comprendan, pues él no podrá contemporizar con la corrupción, nunca jamás.
Obviamente que la filtración de esa interceptación al teléfono del Primer Magistrado debe ser investigada y así se ha solicitado afanosamente. Sin embargo, lo más seguro es que esa investigación exhaustiva terminará como todas las investigaciones exhaustivas que se adelantan en Colombia y en este caso será este el resultado probable, pues si la interceptación se hizo con el pedido del ofendido, lo lógico es que el primero que tendrá que responder por ese hecho es su primer beneficiario.
Al Presidente cada vez más se le conoce su gran capacidad de prestidigitador y ventrílocuo y en esta oportunidad no cabe duda de que la estratagema estaba fríamente calculada, a tal punto que él mismo la advierte, la interceptación, en su conversación con su amigo. Alguien sabía, quizás el Señor, que algún día esa prueba sería necesaria. Y el día llegó. El escándalo que ha generado el trámite del proceso penal seguido contra Raúl Grajales tenía que desembocar en lo que hasta el momento se conoce; entonces la prueba reina, preconstituida como dicen los abogados, salió a la luz pública y el Jefe de Estado sale limpio del bochornoso incidente. La audiencia nacional está energúmena con el abuso que se ha cometido con su Presidente; la seguridad nacional está a riesgo han dicho los corifeos, es inaudito que el Presidente no tenga privacidad. Curioso, en Colombia la privacidad de las comunicaciones es una ilusión. El Ministro de Defensa lo confesó ante el Senado: se hacen interceptaciones indiscriminadas por razones de seguridad. ¡Que casualidad!
© EL NUEVO SIGLO
0 comentarios:
Publicar un comentario